La semana 28 del embarazo marca el inicio del tercer (y último) trimestre. A medida que se acerca el final del embarazo, puedes experimentar sentimientos contrapuestos entre las ganas de que nazca el bebé y el miedo al dolor del parto.
Trata de sobrellevar las 12 semanas que faltan con tranquilidad, disfrutando en la medida de lo posible de este momento único y sin agobios. Estas semanas siguen produciéndose cambios fundamentales dentro de tu vientre.
¿Quieres saber cuáles son esos cambios que están teniendo lugar en tu cuerpo y en el del bebé?
Cambios en el bebé
El bebé sigue aumentando de tamaño y mide ya en torno a 35 cm, con un peso de 1000 g.
Su cerebro continúa desarrollándose y llega a un punto en el que…¡ya es capaz de albergar conocimiento! Su memoria comienza ya a funcionar, eminentemente a través del sentido del oído.
En ese sentido, el pequeño ya es capaz de escuchar diferentes melodías, aunque lo que más reconocerá (por oír desde dentro) es tu voz.
Su piel ha dejado de ser transparante y su cabello crece cada vez más.
Cambios en tu cuerpo
Tu abdomen continúa estirandose a medida que el bebé crece, y es posible que empieces a notar picores en la piel de la barriga. Otras molestias típicas de la semana 28 son los problemas para dormir (empieza a costar el encontrar una posición cómoda), los dolores en caderas, pelvis y muslos, la incontinencia urinaria, y el dolor de espalda.
Además, es posible que tu cuerpo comience a prepararse para la subida de la leche produciendo calostro.
¿Qué puedes hacer por tu bebé?
Si tu RH es negativo, es probable que esta semana te recomienden una inyección de inmunoglobina de RH por si el bebé es positivo.
Por otro lado, ahora que el bebé ya puede escucharte perfectamente, es bueno que le hables y le cantes, ya que eso reforzará el vínculo materno-filial. También es bueno que el papá le hable cerca de la barriga, para que pueda ir conociéndolo.
¿Cómo está yendo tu semana 28 de embarazo?
