Biopsia corial

La biopsia corial es una prueba voluntaria que se puede realizar a partir de la semana 10 de embarazo para detectar posibles fallos cromosómicos en el feto.

La ventaja frente a la amniocentesis es que se puede realizar antes, pero como esta, es una prueba invasiva.

¿Quieres saber más sobre la biopsia corial?

La biopsia corial obtiene tejido celular de la placenta, para poder estudiar si el bebé presenta alguna anomalía genética. Se realiza entre las semanas 10 y 14 de embarazo, y el tejido puede extraerse vía vaginal o abdominal, en función de como esté situada la placenta.

Tras realizarla no hace falta hacer reposo total, pero sí conviene evitar realizar esfuerzos o tener relaciones sexuales durante las siguientes 72 horas.

Se recomienda en mujeres en algún grupo de riesgo como los siguientes:

  • Mayores de 35 años
  • Que ya han tenido algún embarazo anterior con alteraciones genéticas
  • Familiares con problemas cromosómicos
  • Cuando se han observado factores de riesgos en otras pruebas como la translucencia nucal o el triple screening

Esta prueba solo se recomienda en estos casos porque al tratarse de una prueba invasiva, siempre es mejor evitar riesgos. De todas maneras, cualquier puede mujer puede hacerla si lo desea, aunque la Seguridad Social solo la cubre en estos casos de riesgo.

Los problemas más habituales son el sangrado vaginal, la ruptura de la bolsa amniótica o una infección. Debes acudir al médico si tras realizar la biopsia presentas fiebre alta, sangrado vaginal, pérdida de liquido amniótico o si sientes dolor.

Se produce un aborto tras alrededor de un 1% de las biopsias coriales -es semajante en las amniocentesis-, por eso es importante sopesar los pros y los contras de realizar este tipo de prueba. En general, si en el Triple Screening (que es una prueba no invasiva) el resultado muestra un riesgo bajo de tener hijos con anomalías genéticas no es necesario -salvo excepciones- realizar biopsia corial. Por contra, si el riesgo es alto (más de 1/500) la biopsia corial tiene la ventaja de que se puede realizar ya durante el primer trimestre, cuando el embarazo aún no está muy avanzado, y los resultados los tienes en una semana.

Foto vía: Frank de Kleine