Viajar con tu bebé en Semana Santa: en avión, en coche, en tren…

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Semana Santa está a la vuelta de la esquina y tú, que ya tienes reservado tu hotel, esperas impaciente las fechas para disfrutar de unos días de vacaciones con la familia. Pero a medida que se acerca el día, te surgen las dudas. ¿Es malo para el bebé hacer un trayecto largo en avión? ¿Cómo hacer que los niños no se impacienten en el coche? ¿Es mejor ir en tren que ir en autobús?

Para solucionar todas esas dudas, solo tienes que seguir leyendo.

Algunos consejos para viajar con tu bebé en avión

1. Reserva con antelación las plazas

Así podrás escoger los asientos que más te convienen: los asientos de las primeras filas tienen más espacio y están cerca del baño, aunque cuesten un poco más caro, conviene hacer el esfuerzo.  Ten en cuenta que hasta los dos años no es necesario que los niños viajen en asiento propio: pueden ir en tus brazos. Muchas compañias tratan de colocarte al lado de algún asiento libre para que vayáis más cómodos, pero eso depende de lo lleno que vaya el avión.

2. Prepara al niño para el viaje.

Esto quiere decir que el día anterior debe irse temprano a la cama, cuánto menos cansado más tranquilo estará. LLega con antelación al aeropuerto, eso le deja a tu hijo un tiempo de distracción. Podéis ver como despegan los aviones y corretear un poco, porque eso hará que se suba más apaciguado al avión.

En la bolsa de mano debes llevar alguna muda de ropa, pañales a mansalva, algunos juguetes y la comida del bebé.

3. Ármate de paciencia para pasar el control de seguridad.

Como es lógico, los alimentos para el bebé están excluidos de la normativa de los líquidos, que prohibe llevar líquidos en envases de más de 100 mm.  Pero debes llevar los potitos, biberones o puré separadamente, fuera de la bolsa y enseñarlos en el control de seguridad. A veces piden que los pruebes para demostrar que es comida infantil y no una potente arma química.

4. Entretén a tu bebé durante el trayecto.

Lo mejor es llevar una bolsa con juguetes, y meter alguno nuevo, que no haya visto nunca, porque estimulará su atención. Una buena idea es empaquetar los juguetes de modo que el niño, si se ha portado bien, pueda abrirlos. Por supuesto, ni se te ocurra llevar juguetes ruidosos a menos que desees que te odien todos los pasajeros.

5. Soluciona algunas de las típicas molestias durante el vuelo.

Mientras se produce el despegue, el aterrizaje o cualquier otro cambio de altura, ofrece alimento a tu bebé, ya que la acción de tragar ayuda a mantener los oídos ecualizados.

Cierra los orificios de ventilación de arriba de los asientos para evitar las corrientes de aire, y evitar que el flujo de aire reciclado sople sobre el rostro de tu bebé.

Algunos consejos para viajar con tu bebé en coche

1. Prepara bien el coche

Al planificar la salida, debes tener en cuenta todo lo que debes llevar en el coche: una sillita de seguridad, parasoles para que el sol no le perturbe el sueño, almohada, un chupete y juguetes, así como pañales y, si ya no toma pecho, biberones y potitos. También es aconsejable tener a mano el cambiador, esponja y bálsamo.

Por otro lado, viste al niño con ropa cómoda para que no le moleste durante el trayecto.

2. Acómodalo en la sillita

Si bien hay niños que nada más meterlos en la silla del coche se quedan dormidos, otros no paran de llorar. No debes sacarlos de su sillita al mínimo lloro, porque sino se acostumbran (además de que es menos seguro). Es conveniente que vaya alguien al lado de él en la parte de atrás del coche, para que pueda entretenerlo. Enganchar móviles a la sillita es una buena idea, porque el bebé puede jugar con ellos sin tirarlo. Si el bebé es más mayorcito llevar algún juguete pequeño es buena idea (pero un jugueté que no moleste al conductor ni sea peligroso en caso de frenazo).

3. Durante la ruta.

Haced paradas a menudo para estirar las piernas y tomar aire, esto es especialmente importante si el niño ya anda. Si es posible, puedes mantener la ventanilla abierta durante parte del viaje, porque la brisa ejerce un efecto relajante sobre los bebés.

Algunos consejos para viajar con tu bebé en tren

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1. ¿Asientos para todos?

Hasta los cuatro años los niños no tienen por qué pagar,ya que se considera que no necesitan asiento propio. El tren no suele ir lleno, así que eso no es un problema, pero si lo va puedes arrepentirte bastante de no haber cogido un asiento para él. Entre los 4 y los 12 años hay importantes descuentos.

En general, el tren es una buena opción para viajar con niños, ya que hay más espacio que en otros medios de transporte, y es menos frecuente que se mareen. Pero no lo es tanto para viajar con bebés, ya que no tiene sistema de anclaje para la sillita o cochecito y entienden que el bebé debe ir en brazos de la madre. Si vas a hacer un trayecto largo, lleva un portabebés, es más seguro.

2.Durante el trayecto

Si tu hijo ya anda, haz visitas frecuentes al vagón cafetería, servirá para romper la monotonía.

3. Llévale juegos para que se entretenga.

Aquí sirven las mismas indicaciones que para los juguetes en el avión. Puedes llevarle papel y lápiz porque muchos trenes cuentan con mesitas.

Algunos consejos para viajar con tu bebé en autobús

En general los consejos para ir en autobús son similares a los que te di para ir en tren, sólo que para los niños es menos cómodo, ya que deben estarse sentados en su asiento con el cinturón de seguridad y no es aconsejable que pinten o vean un cuento ya que es fácil que se mareen. Los trayectos en autobus suelen ser largos, así que es fundamental entretenerlos de alguna manera que no moleste a los demás viandantes.

Sin embargo para viajar con un bebé un autobús no es tan mala idea. Es cierto que para cambiarle será mucho mas incómodo, pero el bebé puede ir en su sillita y engancharlo con el cinturón, a diferencia de lo que ocurre en el tren.