Se considera que un bebé es estreñido si las heces del bebé son muy duras y el peque siente molestias. Si tu bebé no hace caca con frecuencia pero sus heces son blandas y no se queja de dolor abdominal, no es estreñimiento y por tanto no hay que tomar ninguna medida especial.
La mejor fórmula para acabar con el estreñimiento de tu bebé es prestar atención a su alimentación y realizar algunos cambios, pero lo más importante es consultarlo con el pediatra para seguir las directrices que mejor se adapte a las necesidades de tu bebé.
Es fundamental que tome alimentos ricos en fibra. A través de los vegerales y frutas le aportarás a tu peque la fribra que necesita. Si ya tiene edad suficiente dale la fruta con piel y cuece las verduras el tiempo justo para que no pierda la fibra.
Los líquidos, principalmente el agua, también ayudan a acabar con el estreñimiento ya que el agua favorece junto con la fibra a que las heces sean más blandas.
Existen remedios caseros que pueden ayudar como los masajes abdominales o los baños calientes.