Causas y síntomas del aborto retenido o diferido

Causas y síntomas del aborto retenido o diferido

Esta clase de abortos se llaman aborto retenido o diferido y ocurre cuando el feto que está en la placenta fallece y el cuerpo de la mujer no reconoce ese fallecimiento y no lo expulsa, lo que hace que la mujer siga pensando que está embarazada dado que los síntomas son iguales, pero el feto no tiene vida.

El aborto en la mujer es bastante frecuente, especialmente entre las madres primerizas o en aquellas mujeres que tienen determinadas patologías no compatibles con un buen embarazo o con alto riesgo de aborto, el cual puede retenerse dentro del propio vientre de la madre.

¿Cuáles son las causas?

Los especialistas no pueden afirmar al 100% cuales son las causas de esta clase de abortos pero sí se reconocen diversos factores que pueden dar lugar a ello:

  • Consumo de nicotina y alcohol
  • Uso de determinados medicamentos
  • Enfermedades contagiosas y/o de transmisión sexual
  • Desbalance hormonal
  • Padecer de diabetes mellitus
  • Trabajo o vivienda zonas insalubres
  • Estar sometida a estrés diario
  • Levantamiento de un gran peso
  • Síndrome antifosfolípido – Formación de trombos en los vasos capilares de la placenta, que hacen que la alimentación del feto se altere y finalmente fallezca

Hay varios grupos de mujeres que son más propensas al riesgo del aborto retenido como las mayores de 35 años, quienes hayan tenido diagnosis de embarazo extrauterino, quienes tengan anomalías en el desarrollo del útero o aquellas que han tenido varios abortos; todas ellas constituyen un “grupo de riesgo” con predisposición a un aborto de estas características.

Síntomas

Esta clase de aborto no se caracteriza por contar con calambres o un sangrado abundante. Un aborto retenido apenas muestra síntomas físicos aunque pueden darse casos de que los senos vuelvan a su tamaño normal junto con la aureola, etc. Sólo puede ser detectado mediante un ultrasonido, que será la prueba que revele que no hay ningún latido del corazón.

Es muy recomendable monitorizar en todo momento todas las etapas del embarazo con diferentes análisis, para poder saber cómo se está de salud, el desarrollo del embarazo y finalmente no llevarse una desagradable sorpresa.